Consigue nuevos clientes e impresiona a los que ya tienes con una sólida estrategia de redes sociales para tu pequeña empresa. A continuación, te mostramos cómo elaborarla.
En este artículo
- Paso 1: Conoce a tus clientes
- Paso 2: Define objetivos SMART
- Paso 3: Elige los KPI adecuados para tu negocio
- Paso 4: Decide en qué plataforma quieres centrarte
- Paso 5: Crea (y programa) contenidos
- Paso 6: Mide y haz seguimiento de tus resultados
- Cómo ampliar tu estrategia en redes sociales a medida que crece tu negocio
Según una encuesta de GetApp en 2022 sobre el comportamiento de los consumidores online en redes sociales, un 46 % de los compradores utiliza a diario las redes sociales para buscar información y noticias sobre empresas o marcas.
No es de extrañar entonces que la inversión en publicidad en redes sociales haya aumentado un 19% a nivel global entre 2021 y 2022. Esto significa que la competencia es feroz y que ya no basta con tener un perfil en los diferentes medios sociales.
Por lo tanto, desarrollar una estrategia de redes sociales puede ayudar a tu empresa a destacar con el objetivo de ganar la atención y el interés de la gente. Porque no hacerlo puede afectar al nivel de fidelidad de los consumidores hacia tu marca.
Si eres propietario de una pyme o eres profesional de marketing digital y estás trabajando para mejorar tu estrategia en redes sociales (o te sumerges en ellas por primera vez), en esta guía encontrarás los pasos para ejecutar una estrategia de marketing en redes sociales para pymes.
¿Qué son las estrategias de marketing en redes sociales?
Las estrategias de marketing en redes sociales son planes detallados sobre cómo las empresas utilizan las redes sociales para encontrar, conectar y vender sus productos o servicios a posibles clientes. También incluyen la forma en que las empresas se relacionarán con los clientes existentes para conseguir que repitan la compra y desarrollen un sentimiento de fidelidad hacia la marca.
Una estrategia de éxito está formada por objetivos específicos, tácticas e indicadores clave de rendimiento (KPI, por sus siglas en inglés) predefinidos para medir el éxito y mejorar el rendimiento.
Paso 1: Conoce a tus clientes
El primer paso, y tal vez el más importante, para desarrollar cualquier estrategia de marketing en redes sociales es determinar a quién se va a dirigir. Este paso es muy exhaustivo, y puede incluir desde datos demográficos como la edad y la ubicación hasta detalles como la carrera profesional, la formación y los intereses personales.
Ser lo más específico posible con esta información te permitirá ir más allá de lo básico a la hora de orientar tu plan de marketing digital, e incluso puede ayudarte a descubrir una fuente de clientes potenciales que no sabías que tenías.
Una de las mejores maneras de llevar a cabo este proceso es desarrollar un buyer persona. Un buyer persona es una representación basada en la investigación de tu cliente ideal, que se fundamenta en la información anterior, así como en los conocimientos sobre cómo pasan su tiempo en línea, sus desafíos con un producto o servicio, lo que hacen en su tiempo libre, etc.
Documentar y recoger datos sobre tus compradores ayuda a personalizar la experiencia del cliente. Es importante adoptar esta táctica en la fase estratégica del plan de marketing y redes sociales. Las herramientas de Social Listening pueden permitirte descubrir de qué hablan tus posibles clientes (y dónde).
Consejos para empezar
Define los cimientos y céntrate primero en tus clientes más fieles: afina la información demográfica de los clientes, su ubicación, la forma en que se relacionan con tu funnel de marketing y ventas, etc. Incluso puedes darle un nombre a tu buyer persona para humanizar aún más el perfil. Comienza con algo sencillo, ya que siempre podrás crear nuevos buyer personas más adelante.
Paso 2: Define objetivos SMART
Las estrategias más inteligentes siempre tienen los objetivos SMART, el acrónimo en inglés para definir unos objetivos specific (específicos), measurable (medibles), attainable (alcanzables), relevant (relevantes) y timely (acotados en el tiempo).
Cuando hablamos de estrategias de marketing en redes sociales nos referimos, en primer lugar, a elegir un objetivo general y ser lo más específicos posible en cuanto a la forma de medir el éxito y el tiempo que se tardará en conseguirlo. Asimismo, se debe comprobar que lo que se elija sea acorde a los objetivos generales de la empresa.
Algunos ejemplos de objetivos SMART son:
- Aumentar el engagement de los usuarios con los contenidos promocionales en un X por ciento durante el próximo trimestre.
- Promedio de X clics mensuales al sitio web desde anuncios en redes sociales pagados durante un período de seis meses.
- Conseguir X suscripciones al correo electrónico mediante llamadas a la acción en los contenidos de redes sociales durante el próximo trimestre.
Si estableces objetivos SMART, podrás seguir fácilmente tus progresos y estarás seguro de que todo lo que haces va en consonancia con la perspectiva general de tu empresa. Planificar con antelación elimina las conjeturas de tus actividades diarias y te permite centrarte en hacer un trabajo valioso con la certeza de que está contribuyendo al éxito general.
Consejos para empezar:
Elige un máximo de dos objetivos SMART para tu presencia en redes sociales, escríbelos y empieza a ejecutar tareas para alcanzarlos. Si se trata de una empresa nueva, ganar seguidores y aumentar la notoriedad es una opción potencial. Si estás a punto de lanzar un nuevo producto o servicio, la participación y los clics en tu sitio web desde el contenido promocional también podrían funcionar.
Paso 3: Elige los KPI adecuados para tu negocio
Una parte importante del establecimiento de objetivos SMART es asegurarse de que son medibles, y eso significa definir KPI relevantes para los objetivos generales de tu negocio y alcanzables en las redes sociales.
Estos KPI pueden variar de una plataforma a otra si así lo deseas, pero te recomendamos que empieces con unos que puedas aplicar en varias si es posible. Esto hace que todo sea más fácil de medir y te permite comparar el progreso de una plataforma social con otra.
Algunos ejemplos de KPI a tener en cuenta:
- Engagement: el número de veces que la gente interactúa con tu contenido social.
- Clics de enlace: el número de clics desde el contenido de redes sociales a tu sitio web.
- Tasa de crecimiento de la audiencia: cuánto aumenta (o disminuye) tu número de seguidores con el tiempo.
- Testimonios de clientes: menciones positivas de tu marca en el contenido de redes sociales de los usuarios.
- Menciones de la marca: la frecuencia con la que los usuarios de las redes sociales mencionan tu marca en general.
Cualquiera de ellos es un buen punto de partida, y lo más importante a la hora de elegir un KPI es cómo vas a escalar hasta tu objetivo general.
Si, por ejemplo, lo que buscas es aumentar el share of voice en redes sociales (es decir, la cuota de voz en torno a un tema como podría ser tu empresa), las menciones de la marca e incluso los testimonios de los clientes pueden ser tácticas a tener en cuenta. O si estás empezando y buscas aumentar el conocimiento de la marca, la tasa de crecimiento de la audiencia o el engagement con tu contenido puede ser la mejor opción.
Independientemente de lo que decidas perseguir primero, contar con unos KPI claramente definidos que contribuyan a tus objetivos empresariales es esencial para garantizar que tu estrategia tenga el impacto deseado.
Las plataformas de redes sociales suelen tener su propia herramienta de análisis como punto de partida, pero si quieres profundizar en los datos siempre puedes recurrir a la ayuda de un software para análisis de redes sociales.
Consejos para empezar:
Evita caer en la trampa de las métricas de vanidad. Una métrica de vanidad es aquella que suena bien en una reunión, pero que no proporciona resultados tangibles para el negocio. Más seguidores puede ser algo bueno, pero si tu objetivo principal no es dar a conocer tu marca, puede que no sea lo mejor. Céntrate en los indicadores clave de rendimiento (KPI) que se ajustan a tus objetivos generales.
Paso 4: Decide en qué plataforma quieres centrarte
Una vez que te hayas familiarizado con tu audiencia y hayas elegido algunos objetivos SMART, es el momento de decidir en qué plataformas de redes sociales vas a centrar tu presencia social. A continuación, te ofrecemos un breve resumen de las cinco principales plataformas que utilizan las empresas en la actualidad.
Con más de mil millones de usuarios diarios, Facebook es la mayor red social del mundo. Facebook está conectado a casi todas las facetas de nuestra vida tecnológica, y eso significa que las empresas tienen la oportunidad de llegar a más personas con Facebook que con cualquier otro método.
Dado que Facebook está tan centrado en la conectividad entre redes de personas, publicar actualizaciones y eventos de la empresa, promociones de productos y contenido de concienciación que pida ser compartido es una opción muy completa.
Al ser la plataforma de medios sociales más conversacional, Twitter es el lugar donde compartir opiniones (y, a menudo, opiniones controvertidas). Esto significa que, para las empresas, publicar contenido atractivo que haga que la gente hable de su marca se consigue mejor en Twitter.
También es un buen medio para relacionarse con clientes potenciales y existentes a través de contenido propio. A la gente le encanta que las empresas interactúen con ellos en las redes sociales, pero sin que se excedan. Para ello, céntrate en responder a las preguntas, ofrecer un servicio de atención al cliente y conversar con los usuarios que se interesan por tu contenido.
Al ser una de las plataformas más visuales, Instagram es ideal para las empresas que tienen productos que mostrar (o vender). Las imágenes llamativas son imprescindibles en Instagram, así que céntrate en compartir fotografías de productos, imágenes de marca que conviertan tu mosaico de fotos en una historia, o contenido generado por los usuarios.
Las funciones específicas de Instagram, como los Reels y las Historias, también son una excelente manera de mantenerte conectado con tus clientes en línea. Compartir vía InstaStories los acontecimientos diarios o utilizar Reels para ser creativo con tus contenidos te puede ayudar a diferenciarte.
YouTube
YouTube tiene una mayor barrera de entrada que algunas de las otras plataformas que hemos analizado, pero sigue siendo útil para las empresas que intentan fomentar las ventas en redes sociales. YouTube es un lugar excelente para compartir vídeos en torno a temas especializados, y así mostrar a la audiencia que la marca es una gran conocedora de la industria en la que se encuentra.
Si actualmente no tienes los recursos para crear contenido de vídeo propio, YouTube podría ser más bien una plataforma a la que aspirar, ya que Facebook, Instagram y Twitter son mejores puntos de partida.
LinkedIn es la red social de los profesionales. Si tu organización ofrece un servicio a empresas o se dirige a los propios profesionales, LinkedIn podría ser un lugar ideal para establecer una red y compartir tu contenido.
LinkedIn se está convirtiendo cada vez más en una plataforma de conversación. Esto abre la puerta a que las empresas compartan su contenido e inviten a otros usuarios a opinar o compartir sus propios puntos de vista.
Consejos para empezar:
Céntrate en una o dos plataformas de redes sociales (al principio). Elige en función del sector al que pertenece y del nivel de crecimiento actual de tu empresa. ¿Quieres una plataforma de negocios global? Plantéate usar Facebook. ¿Deseas atraer a tu público objetivo a diario? Entonces elige Twitter. ¿Quieres promocionar y vender productos? Instagram puede ser tu mejor opción.
Paso 5: Crea (y programa) contenidos
Una vez que sepas a quién quieres llegar y qué plataformas quieres abordar, es el momento de crear contenido. El contenido puede adoptar la forma de publicaciones de solo texto, fotos, vídeos o funciones específicas de la plataforma, como las encuestas.
Es fácil empezar a publicar, pero hay que ser más estratégico y elegir los tipos de contenido en función de los objetivos de cada red social.
Por ejemplo, si eres una empresa de venta al por menor que se dedica al comercio electrónico, probablemente querrás mostrar fotos de tus productos. Si eres un negocio local que celebra eventos en persona, mantener a la gente al día con información sobre cuándo y dónde pueden encontrarte es una gran táctica.
Puedes crear este contenido tú mismo con un programa de diseño gráfico online, contratar a alguien a tiempo completo o parcial para que haga el trabajo por ti o utilizar un software más completo orientado a las empresas para crear y gestionar tu contenido.
Procura publicar con regularidad y recuerda relacionarte con las personas que interactúan con tu contenido. Dependiendo de la cantidad de contenido que publiques, del volumen de tus seguidores y de tus demás responsabilidades, puede que quieras considerar la posibilidad de encontrar una herramienta para gestionar redes sociales que te ayude.
Consejos para empezar:
Analiza lo que hace tu competencia en sus perfiles y trata de modelarlo de forma que tengas la menor barrera de entrada. Puede que empieces apoyándote en publicaciones de solo texto y gráficos creados con una herramienta gratuita antes de descubrir que necesitas ayuda o un software adicional. Establece una frecuencia regular y refuerza tu presencia en una o dos plataformas principales antes de ampliarla.
Paso 6: Mide y haz seguimiento de tus resultados
Has llegado a conocer a tu audiencia, has elegido objetivos SMART, has seleccionado plataformas en las que centrar tus esfuerzos y has empezado a publicar con regularidad. Tu estrategia de marketing en redes sociales está en marcha, y ahora es el momento de hacer un seguimiento de los resultados para ver qué está funcionando (y mejorar lo que no).
Basándote en los KPI que elegiste anteriormente y en tus objetivos generales, examina el rendimiento de tus contenidos de forma diaria, semanal y mensual. La mayoría de las redes sociales ya cuentan con herramientas de análisis bastante sólidas para que las consultes, así que puedes empezar por ahí sin preocuparte por la necesidad de un software adicional.
Presta especial atención a los contenidos que mejor funcionan, a los momentos en los que obtienes más interacciones y a la frecuencia media de publicación. Es posible que notes tendencias como que las fotos de tus productos reciben muchos “me gusta”, que tus publicaciones tienen una mayor participación durante la hora del almuerzo o que la gente en una plataforma en particular realmente quiere entablar una conversación.
Utiliza las observaciones que hagas ajustando tu estrategia para aprovechar lo que funciona bien y replanteando los aspectos que den menos frutos. Por ejemplo, puede que descubras que tiene más sentido publicar entre la una y las tres de la tarde a diario, y entonces puedes programar el contenido con antelación para ahorrar tiempo y ser más eficaz.
Consejos para empezar:
Aprovecha al máximo las funciones de análisis nativas de las plataformas de redes sociales (para empezar). Puedes familiarizarte con los datos y experimentar con algunos ajustes en tu estrategia antes de considerar la adopción de un software para análisis de redes sociales. Puede que descubras que no es necesario para tu negocio o que por el contrario necesitas una ayuda adicional.
Cómo ampliar tu estrategia en redes sociales a medida que crece tu negocio
Seguir estos pasos te permitirá dirigirte a las personas adecuadas, enviar los mensajes correctos en cada plataforma y hacer un seguimiento de tu progreso con métricas clave que se corresponden con los objetivos generales de tu pyme.
Por si fuera poco, puedes ampliar este tipo de planteamiento a otras áreas de tu estrategia de marketing digital. Investiga qué opciones de herramientas de marketing para redes sociales existen en función de tus necesidades, tu departamento de marketing y la estrategia que hayas planteado.