Comprar artículos de segunda mano es una forma de consumo que tiene un impacto a nivel social y empresarial. Saber por qué, el qué y cómo los consumidores adquieren y venden estos productos puede servir para que las empresas reformulen sus modelos de producción y exploren nuevas vías de negocio.
En este artículo
- El 41 % de quienes compran artículos de segunda mano lo hace por razones económicas
- La percepción de calidad de los productos de segunda mano frena a quienes no quieren comprarlos
- Comportamiento de los consumidores españoles al vender productos de segunda mano
- La conveniencia le gana la batalla al consumo responsable y sostenible
- Por qué falla el compromiso hacia un consumo más sostenible
Comprar, usar, revender y reusar está siendo una opción para acercar a los ciudadanos y a las empresas a nuevas formas de consumo. Una de estas formas de consumo es la que tiene en cuenta aspectos de sostenibilidad y responsabilidad medioambiental.
Las empresas que quieran evolucionar hacia modelos de negocio acordes con estas preocupaciones tienen que planificar cómo introducir políticas sostenibles en todos sus procesos. Las herramientas para gestionar la sostenibilidad de las empresas pueden ayudar en esta transformación porque son útiles para medir el impacto de estos cambios y nuevas prácticas a nivel medioambiental y económico.
Pero las empresas también requieren entender qué hay detrás cuando los consumidores deciden adquirir productos de segunda mano antes que comprar nuevos. Por ejemplo, para saber si priman los motivos medioambientales sobre los económicos o qué canales se utilizan para la compraventa.
¿Cómo es el comportamiento de los consumidores en la compraventa de productos de segunda mano? En GetApp hemos realizado una encuesta para conocer los hábitos de los consumidores en España al adquirir artículos de segunda mano. Hemos entrevistado a 1009 personas residentes en España, de 18 años o más. Al final del artículo encontrarás la metodología completa de la encuesta.
El 41 % de quienes compran artículos de segunda mano lo hace por razones económicas
Hay una división en los hábitos de los consumidores en lo que respecta a comprar productos de segunda mano y su frecuencia de consumo. El 48 % de las personas encuestadas siempre o a veces considera esta opción y el 31 % no compra muy a menudo productos de segunda mano. El 12 % no compra de segunda mano porque no le interesa.
Entre quienes acostumbran a comprar productos de segunda mano aunque sea a veces, el principal motivo para hacerlo es económico, ya que el 41 % lo hace para ahorrar dinero.
Tres de cada diez personas de este mismo segmento alude a motivos medioambientales: por un lado, el 15 % lo hace por sostenibilidad y, por otro lado, el 14 % porque quiere intentar prolongar el ciclo de vida de un producto existente. Por último, el 13 % de quienes compran de segunda mano lo hace porque así puede encontrar productos o artículos que no se ofrecen nuevos (por ejemplo, aparatos electrónicos descatalogados o prendas vintage).
¿Y cuáles son las principales tipologías de productos con mayor preferencia de compra por parte de quienes consumen artículos de segunda mano?
- Libros (56 %)
- Artículos de electrónica (46 %)
- Mobiliario (42 %)
Los marketplaces online son el canal que utiliza el 57 % de quienes consumen productos de segunda mano
La mayoría de los encuestados que compran de segunda mano utilizan principalmente marketplaces online como Wallapop o Milanuncios (indica el 57 % de este segmento). Se trata de sitios web que ofrecen una gran variedad de estos artículos, de todo tipo.
En la compraventa de productos de segunda mano hay un aparente equilibrio entre canales de adquisición online y offline: las tiendas físicas de segunda mano (47 %) y los mercadillos (43 %) son las siguientes opciones más escogidas.
A la hora de comprar productos de segunda mano, los consumidores pueden optar por hacerlo directamente a través del fabricante original –mediante programas o servicios de reventa internos (por ejemplo, Ikea Circular Hub)– o en marketplaces o tiendas multimarca. Casi la mitad de los encuestados que compran artículos de segunda mano no tiene una forma preferida de hacerlo (47 %). El 38 % prefiere comprar a través de un mercado o tienda multimarca, mientras que el 16 % prefiere comprar a la marca que ha fabricado el ahora producto de segunda mano.
La percepción de calidad de los productos de segunda mano frena a quienes no quieren comprarlos
El 12 % de las personas que han participado en la encuesta no compra productos de segunda mano nunca y no está interesado en hacerlo. ¿Qué razones tienen estos consumidores para no hacerlo?
- El 58 % prefiere un nuevo producto
- El 48 % no está seguro de la calidad de los artículos
- El 44 % no está seguro de la duración del artículo de segunda mano
Este grupo de encuestados parece no considerar el ahorro que podría suponer comprar productos de segunda mano. Tampoco parece interesado por la sostenibilidad o por alargar el ciclo de vida de un producto.
Un 9 % de los encuestados nunca ha comprado productos de segunda mano pero estaría interesado en empezar a hacerlo. Este grupo muestra los mismos motivos para comprar de segunda mano que quienes ya lo están haciendo, aunque con porcentajes algo diferentes: el 70 % está interesado en comprar artículos de segunda mano para ahorrar dinero, el 58 % lo haría por razones de sostenibilidad y el 57 % lo haría para alargar el ciclo de vida de un producto existente.
Las empresas del mercado de la compraventa de productos de segunda mano podrían tomar como base estos motivos para adaptar su cultura y modelo de negocio hacia prácticas más sostenibles. Y, una vez establecidas, pueden comunicar estas prácticas tanto interna como externamente.
Al planificar una estrategia de marketing, no basta con atraer a estos consumidores con la promesa de un menor precio. Habría que ir más allá y hacerles partícipes de la necesidad conjunta de adoptar un estilo de vida y un comportamiento de producción y consumo más sostenible.
Comportamiento de los consumidores españoles al vender productos de segunda mano
Los resultados en la frecuencia de compraventa de productos de segunda mano muestran resultados muy similares entre quienes compran y quienes venden: la mitad de las personas encuestadas vende productos de segunda mano con frecuencia o a veces, misma proporción de quienes los compran siempre o a veces.
Entre las personas encuestadas que acostumbran a vender productos de segunda mano con frecuencia, a veces y no muy a menudo, el principal motivo para hacerlo es obtener un ingreso extra (49 %), seguido, aunque con diferencia, de la sostenibilidad (26 %).
A la hora de vender productos de segunda mano, este grupo de consumidores utiliza principalmente canales online, entre los que destacan los marketplaces online que ofrecen numerosas tipologías de artículos (65 %) y las plataformas de comercio electrónico que se centran en una única tipología (29%), como podría ser ropa (por ejemplo, Percentil) o electrónica (por ejemplo, Back Market).
Si bien a la hora de comprar hay un equilibrio entre el uso de canales de compraventa offline y online, a la hora de vender sus productos de segunda mano los consumidores prefieren los canales online. La venta parece una acción para deshacerse de lo que no se necesita, conseguir dinero con el mínimo de esfuerzo. De ahí que los vendedores podrían preferir beneficiarse de las facilidades para completar la transacción que ofrecen los marketplaces online (subida de imágenes desde un dispositivo móvil, gestión del envío punto a punto por parte de un tercero y gestión digital de los pagos, entre otros servicios).
¿En qué situación se encuentran quienes no venden sus objetos de segunda mano pero están interesados en hacerlo y quienes no lo hacen y tampoco les interesa?
- El grupo de participantes en la encuesta que no vende sus objetos de segunda mano pero está interesado en hacerlo no ha dado el paso aún porque no tiene necesidad de hacerlo (26 %), no tiene muchas cosas para vender (25 %) o no cree que haya compradores para lo que quieren vender (20 %).
- El grupo de encuestados que no vende sus artículos de segunda mano y no está interesado en hacerlo dice que el motivo para ello es porque prefiere tirar o regalar lo que no usa antes de venderlo (31 %), no tiene muchas cosas para vender (27 %) o no cree que sus artículos se vayan a vender (19 %).
La conveniencia le gana la batalla al consumo responsable y sostenible
¿Están los consumidores de España realmente comprometidos con el consumo sostenible y responsable? Las respuestas de los participantes podrían indicar que, por lo menos, se preocupan porque aquello que compran pueda usarse el máximo de tiempo posible: el 88 % se preocupa activamente por prolongar el ciclo de vida de los productos que compra, y el 85 % suele regalar o donar los productos que ya no usa.
Pero, por otro lado, no están dispuestos a compartir el uso de estos productos con otras personas. El 77 % no está interesado en alquilar ropa y el 59 % no está interesado en alquilar aparatos electrónicos. La economía colaborativa, compartida o de intercambio parece que aún se encuentra con algunos grupos reticentes al tradicional trueque, por lo menos en algunas tipologías de productos.
Por ejemplo, en el caso de la restauración y la alimentación, hay posiciones divididas ante formas de actuar que podrían evitar el desperdicio de alimentos:
- El 19 % de los encuestados utiliza las aplicaciones y sitios web en los que se pueden comprar alimentos antes de que se echen a perder.
- El 36 % conoce estas aplicaciones, pero no las utiliza.
- El 34 % no las conoce, pero estaría interesado en utilizarlas.
- El 11 % no las conoce y no le interesaría utilizarlas.
Normalmente, el precio de venta de estos productos con una fecha de consumo a punto de expirar suele ser inferior. El motivo económico, que sí que impulsa a comprar y vender productos de segunda mano, no lo hace ante propuestas que quieren acabar con el desperdicio de alimentos y promover un consumo más sostenible.
La conveniencia supera a la voluntad de reducir el desperdicio de alimentos. En el caso de que un restaurante o una tienda de alimentación participara en medidas contra el desperdicio de alimentos, ¿qué harían las personas encuestadas? El 56 % de los afirma que podría gastar su dinero en este tipo de establecimientos si le fuera conveniente. El 32 % gastaría su dinero en estos establecimientos por disposición a reducir el desperdicio de alimentos.
Por qué falla el compromiso hacia un consumo más sostenible
La compraventa de productos de segunda mano tendría que alinearse con el modelo de economía circular. Este promueve una producción y consumo que aproveche al máximo los recursos materiales y alargue el ciclo de vida de los productos, en contraposición al modelo de economía lineal, que produce y desecha sin tener en cuenta la huella ambiental y sus consecuencias.
Un informe de 2021 de GetApp sobre pequeñas y medianas empresas e implementación de medidas sostenibles indicaba que la mayoría de las pymes encuestadas estaban comprometidas a realizar y mantener acciones sostenibles, habiendo un 57 % de ellas que contaba con software para medir las iniciativas medioambientales o para gestionar el reciclaje de materiales.
Volviendo a la presente encuesta, los consumidores de este estudio de 2022, sobre los hábitos de consumo a la hora de comprar productos de segunda mano, dan más peso al factor precio o al ahorro, lo que puede suponer un freno a la hora de conseguir una transformación en el consumo hacia modelos sostenibles.
Hay comportamientos empresariales que también dificultan el cambio hacia una economía circular. Por ejemplo, cadenas de moda rápida y de bajo coste que apuestan por una experiencia en tienda digitalizada y personalizada, con la idea de poner al consumidor en el centro, y las publicitan con acciones de relaciones públicas. A pesar de ello, siguen teniendo un modelo de negocio con un impacto negativo para el medio ambiente, la ciudadanía o los derechos laborales.
Para que una empresa sea competitiva y sostenible en un mercado de segunda mano tiene que satisfacer las demandas de los consumidores. Aunque también tiene que promover la producción y el consumo consciente y sostenibles desde su cultura empresarial. No todas las empresas podrán hacer movimientos para preservar el planeta similares a los realizados por la empresa Patagonia, cuyo propietario ha ‘donado’ la empresa a la lucha contra el cambio climático transfiriendo la propiedad a un fideicomiso y a una organización sin ánimo de lucro dedicada a luchar contra la crisis medioambiental. Pero sí podrán actuar, aunque sea a nivel local, para introducir prácticas que favorezcan la economía circular.
Metodología de la encuesta:
Para recopilar los datos de este informe hemos llevado a cabo una encuesta online durante julio del 2022. Participaron 1009 personas. El criterio de selección de los participantes fue el siguiente:
- Residentes en España.
- Mayores de edad (18 años o más).
- Fueron capaces de seleccionar la definición correcta de economía circular tras leer una explicación.
Nota: Las empresas o marcas mencionadas en este artículo son utilizadas como ejemplos para mostrar acciones empresariales o modelos de negocio en el contexto del reporte. El artículo no pretende hacer una recomendación sobre ellas.